18/3/09

Quiero estar en tu mente, aunque sea en las historias que se inventa tu imaginación antes de dormir. Quiero estar, no importa cuándo, cómo ni con qué excusa. Sólo pretendo ser la razón de tu desvelo, no más que eso; y así devolverte la gentileza de quitarme el sueño e interrumpir tu nueva rutina de novio perfecto. Si es posible, atormentarte con fantasías indecorosas y que tengas que pedirle perdón hasta a mandinga. Quiero mirarte y estar ahí, impregnada en tu retina como una arena. Si es necesario, molestarte un poco también; no importa dónde, cuánto ni porqué con tal de no serte indiferente. Quiero estar para sentirme viva por existir en tu vida.